El sector arrocero se encuentra ad portas del inicio de la cosecha del segundo semestre del 2021, que por las condiciones de mercado, será un año en el que los productores arroceros nacionales garantizarán el abastecimiento de todo el país sin tener que recurrir a importaciones como sucedió en años previos.

Este hecho se da gracias al esfuerzo que han realizado miles de productores por mantener su producción pese a los múltiples retos que se han presentado ante la pandemia y los bloqueos a lo largo del país, así como por las reducciones en el consumo de arroz en los hogares que se encuentra deprimido especialmente en los hogares más vulnerables, por efecto de la pérdida de ingresos.

Ante esta situación de oferta suficiente y consumo bajo, las importaciones de arroz en lo corrido del año 2021 se han reducido en más del 94% al registrar 7.308 toneladas de arroz en términos de arroz blanco entre enero y abril de 2021, frente a 119.944 toneladas registradas en el mismo periodo de 2020.

Al revisar los países de origen de las importaciones, el principal es Estados Unidos de donde se recibieron 6.642 toneladas, es decir un 88% menos que el año anterior, cuando se habían recibido en el periodo 57.696 toneladas. El siguiente país de origen es Perú con 133 toneladas en enero-abril 2021 frente a 37.782 toneladas en el mismo periodo del año anterior, es decir una reducción de más del 99%. Otros orígenes como Ecuador, Tailandia, Italia, España, India, registran en total 154 toneladas en el 2021, frente a 24.466 toneladas, es decir que estos países registran también una reducción conjunta del 99%.

Ante el comportamiento de las importaciones en el primer semestre, periodo que era deficitario en arroz en años anteriores, y el resultado de la segunda subasta para la importación de arroz de Estados Unidos realizada en junio, en la que se solo se recibieron ofertas por 533 de 17.066 toneladas disponibles, se prevé que durante el año 2021, las importaciones de arroz sean menores a 10 mil toneladas en el año, con lo que se confirma que durante este año la producción nacional podrá abastecer la totalidad del consumo.

Esto lleva al sector a continuar por la senda de la mejora en la competitividad para que en el corto plazo logremos no solo este reto de abastecer al consumidor nacional sino también el anhelado sueño de ser exportadores de arroz y consolidarnos en Colombia como despensa alimentaria del mundo.