Esperamos que la relación Colombia-Venezuela crezca, que recupere el ritmo de comercio de los siete mil millones de dólares de antes, manifestó el diplomático venezolano, quien realizó una conferencia en Agroexpo 2011, sobre el relacionamiento comercial y las características del esquema de complementariedad entre las dos naciones. Según informó el jefe de la cartera agropecuaria a la salida del evento, el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de Alimentos de Venezuela, hace dos meses convinieron varios acuerdos de compra en carne, leche, papa y medicinas veterinarias, entre otros; los cuales, están en estudio en las instituciones respectivas en Venezuela y se espera que se concreten en los próximos meses. Para tranquilidad de los exportadores colombianos, de que no vaya a suceder lo de la vez pasada que se retrasaron algunos pagos, se convino en los nuevos acuerdos que los venezolanos pagarían con carta de crédito, dijo Restrepo Salazar. Así mismo, el embajador venezolano informó que su país está trabajando en una despensa de tres meses, es decir tener provisión de alimentos durante este periodo, lo cual abre más la importación de productos agropecuarios de Colombia; los cuales son muy importantes para Venezuela, dijo. En cuanto al pago de la deuda con los exportadores colombianos, Rincón Urdaneta indicó que CADIVI revisó todas las solicitudes y ya determinó cuales están negadas por ilícitos y por incumplimiento de requisitos. Ya se han pagado de los 877 millones de dólares, más de us$700 millones y, en el Banco Central hay US$150.000.000 revisados y aprobados para que el empresario colombiano vaya con sus divisas y se emita el cheque que debe venir a Colombia, dijo el embajador. Finalmente el Ministro Juan Camilo Restrepo, al señalar y celebrar que las relaciones comerciales entre los dos países se restablecen manifestó: Cuando se cierran los negocios con Venezuela el gran perdedor es el sector agropecuario y cuando se abren, el gran ganador es el sector agropecuario. De tal manera, que vemos con muy buenos ojos, que se estén normalizando esas relaciones, que nunca se debieron haber roto.