Un nuevo impulso a la alianza estratégica para el desarrollo sostenible del sector agrícola colombiano, en especial de la Altillanura, dieron el Gobierno y el Centro Internacional de Agricultura Tropical, CIAT, una de las más prestigiosas entidades de investigación agrícola del mundo. EL CIAT, miembro del Consorcio CGIAR (antes conocido como Grupo Consultivo para la Investigación Agrícola Internacional) ratificó su decisión de permanecer en Colombia, incrementar sus inversiones y estrechar sus relaciones tanto con otras entidades públicas del país, diferentes al Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, como con el sector agro empresarial y universitario del país. Al celebrarse los 45 años del CIAT, evento en el que se destacaron los logros científicos para Colombia, el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan Camilo Restrepo Salazar, agradeció la presencia de la entidad en nuestro país y su propósito de fortalecer la investigación científica para el desarrollo sostenible y ordenado del sector agrícola colombiano. A los actos conmemorativos asistieron delegaciones del cuerpo diplomático acreditado en Colombia, la Ministra de Agricultura de Costa Rica, Gloria Abraham, el Presidente Ejecutivo del Consorcio CGIAR, Frank Rijsberman, el Director Gerente del CIAT, Rubén Echeverría, el zar de los TLC, Hernando José Gómez, los directores del ICA y Corpoica, Teresita Beltrán y Juan Lucas Restrepo, y miembros de la comunidad científica del país y del extranjero. El reto es enorme, pero el CIAT está dando los pasos en la dirección correcta. La alianza con CORPOICA para el desarrollo de la Altillanura puede convertirse, en la medida en que siga esos preceptos, en un modelo a nivel nacional e internacional sobre alianzas de centros internacionales con socios locales para producir conocimiento con impacto, señaló el Ministro Restrepo Salazar. El jefe de la cartera agropecuaria resalto la decisión del Gobierno colombiano de aumentar en un 10 por ciento considerablemente los recursos presupuestales para ciencia y tecnología provenientes de las regalías. Se espera un componente importante de esos recursos para el sector agrícola. El Ministro destacó el papel que jugará el CIAT para el desarrollo armónico de la Altillanura, en la Orinoquía colombiana, considerada la última frontera agrícola del país. Además señaló que el CIAT tiene un gran reto y desafío en nuestro país como es entender que es parte de un sistema de ciencia y tecnología en el que Corpoica, los Cenis, (Centros Nacionales de Investigación) y las universidades, tienen capacidades que deben ser tenidas en cuenta para trabajar para que sea a través de ellas que se valide, adapte y transmita el conocimiento. Esto implica que el CIAT debe ubicarse en un plano estratégico en el que la genética asistida por herramientas biotecnológicas, los modelos macro de cambio climático y estudios de impacto de la ciencia y la tecnología en el desarrollo, sean su aporte al país, subrayó el ministro. El director del CIAT, Rubén Echeverría afirmó que la relación de esa entidad con Colombia es un modelo de lo que son las alianzas públicas privadas. Dijo estar orgulloso de trabajar en Colombia y destacó cómo, durante los 45 años, el CIAT ha capacitado a 15 mil personas, entre ellas cinco mil colombianos. Señaló como uno de los grandes desafíos es fortalecer la investigación científica, producir más alimentos en forma sostenible, hacer frente al cambio climático y a los TLCs y reformar las instituciones. Destacó como uno de los objetivos del CIAT en Colombia la investigación científica conjunta para el desarrollo agrícola de la altillanura. El presidente ejecutivo del consorcio CGIAR, Frank Rijsberman dijo que la celebración de los 45 años del CIAT, que sirvió de marco para el foro Ecoeficiencia: factor clave para una agricultura competitiva en Colombia, debe responder al desafío de alimentar una población creciente.