El caso se registró en un animal mayor de 13 años que murió en el predio, según el reporte oficial a la OIE enviado por las autoridades brasileras. De conformidad con las normativas y los procedimientos de rutina para una investigación de sospechas de enfermedades nerviosas, la muestra fue sometida a la prueba para el diagnóstico de rabia, que resultó negativa. Por tratarse de un animal adulto y con resultado negativo para rabia, la muestra fue enviada para pruebas de laboratorio del sistema de vigilancia para Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB). El Ministerio de Agricultura Pecuaria y Abastecimiento de Brasil MAPA, obtuvo resultado positivo en su laboratorio nacional, y con el fin de reconfirmarlo, remitió la muestra a la Agencia de Laboratorios Veterinarios y Sanidad Animal (AHVLA) ubicada en Weybridge (Gran Bretaña), reconocido como laboratorio de referencia mundial para EEB, donde se confirmó como positivo el resultado a la prueba de inmunohistoquímica. Según la información producto de la investigación epidemiológica aportada a la fecha por el MAPA, se trata de un animal alimentado en pastoreo y que aparentemente no estuvo asociado al consumo de alimentos concentrados elaborados a partir de proteína de origen mamífero, considerado como principal riesgo de transmisión de la EEB. Las condiciones presentadas por Brasil de la situación sugieren que puede tratarse de un caso no clásico de la enfermedad (caso atípico) que tiende a ocurrir en animales más viejos. En ese contexto y de acuerdo con las disposiciones del Capítulo 11.5. del Código sanitario para los animales terrestres de la OIE, no se ha modificado el estatus de Brasil como país de riesgo insignificante. Es importante considerar que la conducta asumida por la Organización Mundial de Sanidad Animal, OIE, de seguir considerando a Brasil como país de riesgo insignificante para Encefalopatía Espongiforme Bovina, es un factor fundamental a tener en cuenta para dimensionar el riesgo que genera esta situación, tanto para Brasil como para sus socios comerciales y para adoptar medidas frente al caso. El ICA adelanta el análisis de la información disponible y se encuentra realizando consultas oficiales al Ministerio de Agricultura de Brasil y así conocer más detalles del caso, que le permitan al Instituto adoptar las medidas necesarias para garantizar la sanidad del hato nacional con respecto a la enfermedad. Es importante precisar que Colombia no importa de Brasil animales vivos ni materiales considerados de riesgo y que por lo tanto, el hato ganadero nacional no puede considerarse como expuesto a ningún riesgo por EEB procedente de Brasil. Adicionalmente, los ganaderos del país deben tener en cuenta que las autoridades sanitarias de Colombia representadas por el ICA, mantienen en aplicación todas las estrategias de prevención de la EEB que permitieron el reconocimiento del país como de Riesgo Insignificante y gozan de un amplio reconocimiento de parte de los Organismos Sanitarios Internacionales por su trasparencia y por la solidez técnico científica de sus decisiones, capacidad ampliamente demostrada a lo largo de su existencia. Fuente: ICA